Sin duda alguna... la "Ciudad de las Tres Culturas" te embruja irremediablemente.
cuando la ves de día...
Pero...
¡Ay mortal cuando viene la noche...!
Toledo se vuelve hechizo y encantamiento...
El juego de las sombras con las luces...
Los reflejos de las aguas del Tajo...
Los colores azules en los edificios...
Toledo de noche seduce...
te atrapa con sus garras...
Y cautivo eres de su fascinación.