Pueblos de Toledo (Guías Turísticas, Rutas y lugares de interés): septiembre 2023

Un verano de hace unos cuantos años... empecé a escribir una serie de relatos cortos y sencillos... para amenizar los "fuegos de Campamento" (cuando estaba de monitor) en el por entonces "Campamento Viriato" (Navamorcuende), en la Sierra de San Vicente (Toledo).

Historias con un aire de misterio y a veces de miedo... combinación perfecta para las noches, que despertaría la atención de aquellos chicos de ciudad...

La leyenda del duende del Piélago (Las dos niñas y los tres deseos...)

Cuenta una vieja leyenda... que en un pueblo a los pies de la sierra de San Vicente, vivían dos hermanas que solían subir a una paraje que llamaban "El Piélago".

Un lugar con inmensas arboledas, arroyos de agua limpia y fresca... y una alfombra verde de hierba, adornada con miles de florecillas de diversos colores...

Un día las hermanas (Enya y Sonia), subieron para pasar el día... y al llegar a un gran roble centenario... apareció por detrás un duende que las dijo:

Os concederé 3 deseos... uno por cada momento que viváis en el tiempo (niñez, juventud y vejez).

Confusas y asustadas, las hermanas se abrazaron... pero el duende las volvió a hablar...
"No tengáis miedo, no voy a haceros daño"
"Decirme niñas..."
"¿Qué deseo queréis hacer realidad...?

Enya y Sonia se miraron y contestaron al duende:
"Golosinas y juguetes"

El duende las contestó:
"Cuando lleguéis a casa, vuestros deseos serán cumplidos".

"Y cuando seáis mayores de edad... volveremos a encontrarnos..."
Y entonces el duende desapareció.

Las niñas regresaron a su casa... y al entrar apenas podían pasar... infinidad de caramelos y juguetes inundaban su casa...

Y pasó el tiempo... y siendo ya jóvenes mujeres... subieron de nuevo al "Piélago"... y en el mismo centenario roble... apareció por segunda vez el duende... con el mismo aspecto que recordaban, sin haber envejecido nada.

Ellas ya no se asustaron, y al mirarlas el duende las dijo:

"He venido para concederos el segundo deseo... como ya os dije siendo niñas".

Enya le contestó:
"Pues a mí concédeme la virtud de la belleza, de la salud y la prosperidad"...

Y seguidamente Sonia pidió también su deseo...

"Deseo... viajar y conocer muchos lugares, y tener siempre dinero para poder realizarlos"...

Y lo que querían y anhelaban, se cumplió al poco tiempo...

Y el tiempo pasó y pasó... y las hermanas con mucho esfuerzo y cansancio, decidieron subir por última vez al "Piélago"... y acercarse para ver al "Roble grande", que tanto había hecho cambiar sus vidas...

Y por tercera vez... el duende salió por detrás de él, con el mismo aspecto que el que vieron por primera vez hacía ya unos 70 años.

Las dos viejas damas, apenas veían ya con claridad y su voz entrecortada secían palabras en un tono bajo...

El duende las habló:

"He venido a cumplir vuestro últino deseo en vuestra vejez"

"Decirme... "

"¿Qué puedo hacer por vosotras ancianas...?"

Enya se quedó dudando un tiempo... y al final le contestó...

"Mi mayor deseo es que nos vuelvas otra vez niñas, y volvamos a vivir y a sentir todas las cosas maravillosas que hemos vivido"...

A Sonia la brillaron los ojos y mirando al duende le dijo:

"Vuelve a concedernos los mismos 3 deseos... de niñas, jovencitas y abuelas... que nos hicieron tan felices".

Y cuenta la leyenda... que una niebla envolvió a aquellas ancianas, y al disiparse se miraron sorprendidas... sus cuerpos se habían transformado en las niñas que fueron...

Su pelo largo y brillante, su piel tersa y suave, su voz, su cuerpo... todo había cambiado... volvían a ser niñas...

Y cuenta la historia... que las situaciones, los deseos, el duende y las etapas de la vida (niñez, juventud y vejez), se fueron sucediendo interminablemente, incluso hoy en día.

Por eso... cuando vayas a la Sierra de San Vicente (Toledo), y te acerques a ver el "Roble grande" en "El Piélago"... es posible que veas a dos niñas de la mano, y en el mejor de los casos... al duende de los 3 deseos...