sábado, 28 de marzo de 2020

La Abadía de San Vicente - Sierra de San Vicente (Toledo) - Sin apenas rastros o datos de ella...

SIERRA DE SAN VICENTE
PICO DE SAN VICENTE
ABADÍA DE SAN VICENTE
HINOJOSA DE SAN VICENTE (TOLEDO)

Es muy curioso... que aquellas cosas de las que apenas quedan restos, datos o imágenes... son las que más nos intrigan, nos llenan de misterio y curiosidad...

Un edificio entero... que desaparezca sin dejar apenas rastro (tan sólo quedan piedras de sus muros diseminadas...), nos llena de pensamientos con sus incógnitas, suspense e imaginación... 


Cuéntase que la poseyeron Templarios, quienes acumularon en tal casa fuerte considerables rentas y riquezas. Lo seguro es que castillo y rentas agregáronse á la iglesia de Toledo, conservándolos la Abadía de San Vicente, caducada dignidad que obtenía uno de sus capitulares.

Una excursión por la Sierra del Piélago
Jerónimo López de Ayala y Álvarez de Toledo - Decimoquinto Conde de Cedillo (*) Junio de 1904

(*) Historiador, escritor, archivero y político (1862-1934)


Abadía Canonical (formó parte del castillo) – Reinado Alfonso VII (Siglo XII).

Abadía canonical de san vicente
En el reinado de Alfonso VII (1126-1157) se había fundado la abadía cononical de San Vicente de la sierra, hecho que pudo tener lugar en los años 1156-1158. Se fundó por monjes de la orden regular de San Rufo, que venía de Aviñón.

Se construiría en las inmediaciones del lugar en donde tuvieron refugio los santos mártires y hermanos talaveranos, cerca de la torre oriental del castillo.

Esta Abadía no solo tendría una función religiosa sino también de repoblación de la zona.


Lo que debes saber...

Anacoreta
Persona que vive en lugar solitario, entregada a la contemplación y a la penitencia.

Eremitorio
Lugar solitario habitado por un eremita o por varios que viven separadamente; a veces hay una ermita o capilla que puede ser lugar de peregrinación.

Monje
Religioso que pertenece a una orden monacal cuyos integrantes viven en comunidad en monasterios.

Fraile
Miembro de una comunidad o familia religiosa que ha hecho votos de pobreza, castidad y obediencia. El fraile lleva un modelo de vida según las reglas de su comunidad. Suelen estar recluidos en Conventos.

Abadía
Es un monasterio o convento cristiano bajo las órdenes de un abad o una abadesa, que son el padre o la madre espiritual de la comunidad. Un priorato solo difiere de la abadía en que el monje superior lleva el título de prior en lugar de abad.

(Datos Wikipedia)


La Abadía de San Vicente de la Sierra
Origen - Manuscritos - Liturgia Medieval

ORIGEN

En la segunda mitad del siglo XII, coincidiendo con el declive cluniacense, se produjo una nueva oleada de religiosos, que tuvo como protagonistas a los canónigos regulares y a los monjes del Císter.

Especialmente significativa, en relación con la cuestión ritual, es la llegada de canónigos regulares pertenecientes a dos observancias diferentes: Prémontré y San Rufo.

Los primeros se establecieron en Santa Columba a petición del arzobispo don Raimundo en 1152. Los “rufonianos” lo hicieron primero en San Vicente de la Sierra, entre 1156 y 1158, a petición del mismo papa Adriano IV (1154-1159), y más tarde también en Santa Leocadia (1162), San Servando (hacia 1175) y Santos Justo y Pastor (Alcalá de Henares, desde 1187). 

Los canónigos se establecieron en enclaves estratégicos, bien por estar estrechamente ligados a la devoción popular, bien por tratarse de antiguos cenobios mozárabes. 

Así, en San Vicente de la Sierra se conmemoraba a los mártires de Talavera de finales del siglo III, Vicente, Sabina y Cristeta, muy venerados por el pueblo. Lo mismo sucede con la basílica martirial de Santa Leocadia, elevada a categoría abacial en 1178.


Definiciones

Cluniacense: Integrante de la Orden de Cluny, fundada en Borgoña por San Odón hacia 930 como reforma de la regla benedictina.

Rufonianos: se trata de una orden de canónigos. En 1039 cuatro clérigos de la catedral de Aviñón  se establecieron en el santuario de San Rufo, en las afueras de la ciudad, donde adoptaron una vida monacal austera y pobre, acorde con lo que se estaba efectuando en la época. Eran partidarios del ascetismo moderado y aceptaron la renuncia de la propiedad que el papa Nicolás II estableció en el Sínodo Laterano de 1059

Canónigos: es el eclesiástico provisto de una canonjía (cargo o prebenda por la que se pertenece al cabildo de iglesia catedral o colegial). Algunas iglesias no son regidas por un sacerdote individual, sino por un colegio o cabildo: son las catedrales y las colegiatas. Entre las funciones de los cabildos está la recitación del oficio público de la Iglesia.

Cenobio: monasterio o convento; casa donde viven en comunidad los religiosos o religiosas.

Abacial: Del abad o de la abadesa o relacionado con el superior de un monasterio.

MANUSCRITOS
 
En la Biblioteca Capitular de Toledo (BCT), se conservan cinco manuscritos (códices), en los que se encuentra el ms. 39.25, martirologio de Usuardo para uso de los canónigos regulares de San Vicente de la Sierra de la segunda mitad del siglo XII.

Igualmente en la Biblioteca Nacional de Madrid, se conserva el Ritual de los canónigos regulares de San Vicente de la Sierra.

LITURGIA MEDIEVAL
 
La relación entre la liturgia de la institución capitular toledana y la de la periférica fundación de San Vicente de la Sierra y, al mismo tiempo, la influencia ejercida por cluniacenses y canónigos desde ambos centros eclesiásticos en el posterior oficio toledano. 

El conjunto de fiestas celebradas en honor de los santos y santas en el curso del año litúrgico constituye uno de los elementos clave de los libros litúrgicos medievales para identificar y analizar la tradición de una Iglesia local o de una Orden religiosa. 

En concreto, los oficios que he comparado son seis: San Vicente mártir (22 de enero), santa María Magdalena (22 de julio), martirio de san Juan Bautista (29 de agosto), Natividad de santa María (8 de septiembre), Todos los Santos (1 de noviembre) y san Martín (11 de noviembre). 

Desde la perspectiva litúrgica, se puede comprobar el influjo ejercido por la tradición cluniacense a través del ms. 44.2 en el scriptorium de San Vicente de la Sierra y en la posterior codificación litúrgica toledana.

Las antífonas son las piezas de canto, en general breves, que tienen por función encuadrar los salmos. Los responsorios, por su parte, son igualmente piezas cantadas, de cierta extensión, que van a continuación de cada lectura de la Escritura y de los Santos Padres en el oficio de la noche o maitines.

Es evidente el influjo cluniacense que desde la catedral primada se produjo en la liturgia de la abadía de San Vicente

La abadía de canónigos regulares (*), que observaba las Consuetudines (*) de San Rufo, no estuvo afiliada a la casa madre de Aviñón-Valence. La tradición peculiar de San Vicente, experimentó un proceso de decadencia quizá motivado por el declive histórico de la fundación de canónigos en el transcurso del siglo XIII.

(*) es una orden religiosa católica formada por canónigos (es decir, sacerdotes) de una comunidad (una canonjía, una catedral, etc.) que observan la vida en común, según una regla, y la combinan con el oficio clerical y la vida apostólica. Las ramas femeninas son las llamadas canónigas
(*) Costumbres, reglas...

Fotografía Satélite de la situación apróx. de la Abadía de San Vicente
(Google Earth)

La llamada Abadía de San Vicente se fundó en estas alturas, por monjes de la orden regular de San Rufo que venían de Aviñón, a mediados del siglo XII.
Fueron enviados aquí por el Papa Adriano IV que solicitó la fundación a el rey Alfonso VII. Una de las causas de estas fundaciones era la repoblación de los territorios recién reconquistados a los musulmanes.

El castillo árabe de la cumbre parece que formó parte de sus dependencias y el abad tenía encomendadas las llaves del mismo.
Fue la primera fundación de canónigos regulares dependientes de la diócesis de Toledo, aunque se encuentre en territorio del obispado de Ávila. Tuvo gran influencia en la comarca de Talavera.
Pero los restos que quedan del mismo son apenas unos muros de anchura considerable que se encuentran en el collado inmediato al castillo en su lado oriental.

La Abadía de San Vicente de la Sierra
Ciudades del Medievo - Colegiatas

CIUDADES DEL MEDIEVO

Estas tierras se caracterizaron por la dispersión urbana ya en época islámica, cuando formaron parte de la Marca o Frontera Media de tiempos omeyas y del extenso Reino Taifa de Toledo en el siglo XI.

Lo cierto es que cinco de nuestras ciudades estaban ya incorporadas al dominio cristiano en la segunda década del XIII: Toledo, Talavera, Madrid y Guadalajara lo hicieron en torno a 1085 y Alcaraz más de un siglo después, en 1213.
Todas eran ciudades de realengo, salvo Talavera, que en 1369 fue transferida por Enrique II a la mitra (*) toledana, y ejercían jurisdicción sobre extensos alfoces (Territorio que rodea una ciudad y de la que se depende  de ella económicamente), menos Ciudad Real, que no podía crecer al estar rodeada por los dominios calatravos. 

(*) Cargo de Arzobispo u Obispo

La catedral de Toledo inició su andadura en 1086, un año después de la toma de ciudad, cuando la mezquita mayor es dedicada al culto católico bajo la advocación de Santa María. Después de más de dos siglos de obras y trabajos constantes, el templo está prácticamente construido y los más afamados artistas trabajan en su interior.

LAS COLEGIATAS
 
Las colegiatas constituyen un grupo especial de iglesias a medio camino entre el esquema catedralicio y el parroquial. 

Estaban constituidas por un colegio o cabildo de canónigos que las regía y atendía sus funciones litúrgicas. Cuatro se instalaron en la archidiócesis de Toledo: la abadía de San Vicente de la Sierra, fundada hacia 1156 y ubicada en el término de Hinojosa de San Vicente, la abadía toledana de Santa Leocadia extramuros, la colegial de Santa María de Talavera, y la de los Santos Justo y Pastor en Alcalá de Henares, constituida en 1477 a petición del arzobispo Alonso Carrillo.

Conforme avanza la Edad Media la situación de esta institución abacial, al igual que de la de San Vicente, debió hacerse difícil, de ahí que en 1300 el prelado Gonzalo Díaz Palomeque decidiera reorganizar la vida de las dos abadías e incluir a sus abades entre las dignidades capitulares

LO QUE NO SABÍAS...
 
Como consecuencia de una carta del Papa Adriano IV, fechada el 18 de febrero de 1156, y dirigida al rey AlfonsoVII, se fundó con la intervención del arzobispado de Toledo, Don Juan (1152-1166), la Abadía de San Vicente de la Sierra.

En 1666 los hermanos Francisco de Raudona e Isidoro del Espíritu Santo, acuerdan la construcción de una Ermita de los “Santos Mártires” para hacer vida eremítica. El maestro de cantería fue Pedro Nabeda vecino de la villa de San Martín de Valdeiglesias. 

Dicho maestro empleó para la construcción de dicha Ermita, los sillares de la Abadía de San Vicente, en la que ya derruida, aún quedaban dos sepulcros de piedra sin epitafios o inscripciones… por ello actualmente apenas son perceptibles sus restos...

2200 reales fue el precio de la primera construcción, que después se vio incrementada hasta los 80.000 reales, que se llegó a gasta Francisco de Raudona, ya que se fue creando un "torreón" con distintas dependencias para los eremitas que la habitaban.

Dibujo explicación colegios
(Como Informador Turístico en la Oficina de Turismo 
de la Sierra de San Vicente)

Los Escriptorios de la Abadía de San Vicente
Sólo muy contadas iglesias urbanas (generalmente agrupadas a tal fin) y algunas de las titulares de los principales arciprestazgos, dotadas con mejores efectivos humanos, mantenían sus escuelas hasta concluir el ciclo de la formación eclesiástica. Las más acreditadas eran las escuelas dependientes de instituciones eclesiásticas con estructura colegiada, como los monasterios, las colegiatas, las abadías de canónigos regulares y la escuela catedralicia de Toledo.
Adoptaron la fórmula de abadía o priorato de canónigos regulares, con fuerte impronta monástica, generalmente bajo la regla de San Agustín, sin abandonar por ello el desempeño de las funciones parroquiales, lo cual les seguía imprimiendo el carácter de clero dedicado a la vida pastoral activa por encima de la vida contemplativa.

Cuatro iglesias menores se adhirieron a este modelo en la segunda mitad del siglo xii: la abadía de San Vicente de la Sierra en 1156, la abadía de Santa Leocadia extramuros de Toledo en 1162, la abadía y luego priorato de San Servando también extramuros de Toledo en 1178 y el priorato de San Justo de Alcalá antes de fines del siglo xii.
Las tres iglesias de canónigos regulares (San Vicente de la Sierra, Santa Leocadia de Toledo y San Justo de Alcalá), por ser de filiación monástica, no sólo mimaban con especial atención a sus escuelas, sino que disponían de escriptorios (*) propios para la confección de libros, una actividad muy vinculada con el mundo de las escuelas. Estos escriptorios abastecían de libros litúrgicos a toda su área de influencia.

 
Autora: Antonia Donosa
Primer Premio Cerámica Tradicional
Bienal de Cerámica de Talavera de la Reina 
2011
 
Cerámica "Monjes Escriptorio"
El escriptorio mejor conocido es el de San Vicente de la Sierra, monasterio que comenzó siendo de canónigos de San Rufo de Toulouse y luego cambió a la regla de San Agustín. No solamente trabajaba para las necesidades internas, sino también para la amplia comarca de Talavera, dentro de la cual se hallaba situado. Nos ha dejado un conjunto de cuatro códices litúrgicos, todos fechados o fechables, que van desde mediados del siglo XII hasta el año 1208.

(*) El término scriptorium,​ literalmente «un lugar para escribir», se usa habitualmente para referirse a la habitación de los monasterios de la Europa medieval dedicada a la copia de manuscritos 

Muestran un house-style (estilo editorial) peculiar y documentan admirablemente el paso de la escritura carolina a la pregótica en Castilla. Destacan también por la abundancia de melodías litúrgicas escritas en notación aquitana (sistema de singnos musicales). Su decoración es absolutamente original.
El arzobispo Díaz Palomeque obtuvo de Bonifacio VIII en 1300 la facultad de convertir las abadías de Santa Leocadia de Toledo y San Vicente (*) de la Sierra en colegiatas seculares. El motivo invocado para dar este paso fue que ya carecían de canónigos.

Sin embargo, parece que la comunidad regular de San Justo estaba llamada a transformarse en breve, que no a desaparecer, porque sorprendentemente antes de 1312 nos encontramos con la noticia de que también San Justo había abandonado la regla de los canónigos de san Agustín y se había convertido en colegial de canónigos seculares, siguiendo el ejemplo de las abadías de Toledo y San Vicente de la Sierra. 

(*) San Vicente, junto con sus hermanas Sabina y Cristeta, son los mártires de Talavera, que están enterrados en la iglesia románica de San Vicente de Ávila; Santa Leocadia es una mártir confesora de la persecución de Diocleciano, muy venerada en Toledo, donde Sisebuto le había erigido una basílica sepulcral en los principios del siglo VII extramuros de la ciudad; San Servando o Cervantes, asociado con San Germán, son dos santos mártires orientales, a los que se tuvo mucha devoción en la época visigótica; finalmente los santos niños Justo y Pastor, mártires de Alcalá, fueron popularísimos en toda la España visigoda, desde la zona central de la Península hasta el área de Narbona, de cuya catedral son titulares


Sabías que...
 
En la novela de Umberto Eco (El nombre de la Rosa), los personajes principales 
visitan el scriptorium y se conoce a muchos estudiosos, copistas y rubricantes... en donde se desarrolla la trama principal de la misma...

Fue publicada en 1980

"Al llegar a la cima de la escalera entramos, por el torreón oriental, en el scriptorium, ante cuyo espectáculo no pude contener un grito de admiración". 

"En otras ocasiones y en otros sitios vi muchos scriptoria (*), pero ninguno conocí..."

"Los antiquarios, los copistas, los rubricantes (*) y los estudiosos estaban sentados cada uno ante su propia mesa, y cada mesa estaba situada debajo de una ventana."

(*) Los scriptoria tenían la tarea de copiar para conservar el saber antiguo y todo el corpus de obras espirituales.

(*) Que rubrica o firma

Abadía de la película "El nombre de la rosa"

Bibliografía
 
Temas Toledanos
Comarca de la Sierra de San Vicente
Instituto Provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos
Diputación Provincial

El Convento del Piélago, La Ermita y la Abadía
La Mejor Tierra de Castilla
Miguel Méndez-Cabeza

Un ermitaño en la Sierra de San Vicente en el s. XVII: el hermano Francisco de San Vicente. Nuevos datos sobre su azarosa y desconocida vida (pdf)
Ángel Deza Agüero (Historiador)
Colectivo Arrabal - Cuaderna

Una excursión por la Sierra del Piélago (pdf)
Conde de Cedillo

El Culto a Venus en el cerro de San Vicente (Toledo) (pdf)
María Seguido Aliaga

La Introducción del Rito Romano en la Iglesia de Toledo
El papel de las Órdenes religiosas a través de las fuentes litúrgicas
(Toletana 10 – 2004) 151-177
Juan Pablo Rubio Sadia


La persona de Juan Ruiz (Arcipreste de Hita)
Ramón Gonzálvez Ruiz. Catedral de Toledo
Iglesia y Vida Urbana. Las Ciudadades del Arzobispado de Toledo a fines del Medievo
María José Lop Otín (*)
Universidad de Castilla-La Mancha

(*) Directora en Historial Medieval

Escriptorium (Wikipedia)
https://es.wikipedia.org/wiki/Scriptorium

Códices
http://www.facsimilia.com/codices-medievales-manuscritos-religiosos.html

El nombre de la rosa
https://es.wikipedia.org/wiki/El_nombre_de_la_rosa


Ermita de Nuestra Señora del Piélago - Sierra de San Vicente (Toledo) - Datos y Misterios...

En la falda de este monte y por el lado del norte se extiende una llanura cercada de colinas y notable por sus viejas encinas, en la que se descubre otra capilla toscamente construida, consagrada a la Virgen Nuestra Señora, nombre que en casi todos los pueblos comarcanos es objeto de especial devoción.

PREFACIO DIRIGIDO A FELIPE III, REY CATÓLICO DE ESPAÑA.

Juan de Mariana
De rege et regis institutione (Toledo 1599)
(Del Rey y de la Institución de la Dignidad Real)


Al acercarnos y nada más descender por el camino de tierra hacia el Convento de "El Piélago", encontramos a la izquierda del mismo, unas ruinas que apenas son visibles por las zarzas y vegetación varia que crece descontrolada.



También a la izquierda de la puerta principal de la que fue la entrada al Convento, y una vez que franqueamos la explanada... veremos igualmente restos de paredes, que son imperceptibles debido al igual que la anterior por la espesura y por las plantas...


Junto al edificio restaurado de Claustro del Convento, hay los restos de una capilla con la parte frontal de lo que fue su altar. Prácticamente comido por la vegetación, no se pueden apreciar los detalles de lo que fue en su día...(en la foto de arriba se aprecian las ruinas en la parte inferior izquierda).

Dibujo Ermita para explicación colegios
(Siendo Informador Turistico en la Oficina de Turismo 
de la Sierra de San Vicente)

Aunque al parecer, es en las primeras ruinas descritas... en donde puede encontrarse  la posible ubicación de lo que fuera una pequeña ermita, de construcción recia y muy venerada por los pueblos de alrededor...

Ermita de la Virgen del Espino o de los Ángeles
(Fotografía del libro de Esteban y Jesús Sánchez sobre Hinojosa)

Ermita de Nuestra Señora del Piélago

Salimos a caballo desde Navamorcuende, acompañado del ilustrado D. Bonifacio Blázquez Oliva, hijo de D. Pedro Lázaro rico hacendado de Navamorcuende y un rústico guía que conocía el terreno.

Tras hora y media de marcha llegamos al Piélago…

Hubo una pobre y rústica ermita, en la que con el nombre de Nuestra Señora del Piélago con devoción en los pueblos comarcanos… acaso sustituyó la ermita a un templo de Diana, como el ilustre Padre Juan de Marina insinuó en un tratado suyo.


Ni de tal templo pagano, ni de cierta inscripción votiva que allí puso un Lucius Vibius Priscus (no sabemos si se refería a Lucius Junius Quintus Vibius Crispus, senador romano…), pero sí encontramos una gigante ruina del antiguo Monasterio de los Carmelitas… 

Poseyó tierras de labranza, una huerta, una alameda, prados, viñas y censos… más una brillante recua de mulos y unos pozos de nieve.. (también hay constancia de castaños, nogales, ciruelos y guindos…)

Una excursión por la Sierra del Piélago
Jerónimo López de Ayala y Álvarez de Toledo - Conde de Cedillo (*)
Junio de 1904

(*) Historiador, escritor, archivero y político (1862-1934)

Situación apróx. de las ruinas de la Ermita de la Virgen de los Ángeles
(Google Earth)
No debemos confundirla con el eremitorio de la cueva de los Santos Mártires pues era una ermita que primero estuvo bajo la advocación de la Virgen del Espino más tarde del Piélago y posteriormente Nuestra Señora de los Ángeles, advocación muy frecuente de las ermitas de y conventos de los carmelitas pues fue esta orden la que se estableció en el convento del Piélago junto al que se sitúan las ruinas de la ermita ocultos por las hiedras y las zarzas.
La imagen era venerada en toda la comarca y se hacían numerosas procesiones y rogativas demandando lluvias o salud ante las epidemias...
http://lamejortierradecastilla.com/el-convento-del-pielago-la-ermita-y-la-abadia/


Los muros que muestras son de la antigua ermita de Nuestra Señora del Piélago del siglo XVI y en donde estuvo la reliquia de la piedra con los pies y el báculo de San Vicente antes de que fuera robada por Manuel Barrasa en aquellos años y que hoy se conserva en la Colegiata de Talavera.

David Gutierrez Pulido 

Iglesia de Santa María la Mayor (La Colegial)
Talavera de la Reina (Toledo)

Dicha reliquia sería robada a finales de septiembre 1604, fue robada de la primera ermita de la Virgen del Espino o del Piélago que a partir de 1450 se construyó en su honor, para ser llevada a Talavera de la Reina a la Iglesia de Santa María la Mayor (La Colegial).

Dicha ermita pasando el tiempo… formó parte de un Convento Carmelita que junto a ella se construyó.
(Biblioteca Virtual de Castilla-La Mancha) – Archivo pdf

Pies y báculo de San Vicente

En ella puede observarse tras una reja la piedra en la que, según la tradición, permaneció de pie  San Vicente, derritiéndose la roca y quedando marcados los pies y la punta de su báculo. Cuenta la leyenda que este hecho se produjo en el momento en que el santo talaverano comparecía ante Daciano en el pretorio romano que, también según la tradición, se localizaba en la plaza de San Esteban.

Curiosamente, en la cueva de los Santos Mártires que se encuentra en la cumbre del cerro de San Vicente, su redescubridor Francisco de Raudona creyó ver la marca de las espaldas de los tres santos en tres concavidades que todavía pueden observarse en la piedra del lado derecho de la gruta.

Angel Deza ha publicado un documento del archivo municipal de Castillo de Bayuela en el que se relata cómo la piedra que hoy está en la capilla de la Colegial fue robada del santuario de El Piélago por un individuo probablemente pagado por el concejo talaverano. Recordemos que en la iglesia de Santiago el Nuevo existe otra piedra relacionada con el santo.


Otros Datos

Es bastante probable… que en el interior de la cavidad de la Cueva de los “Santos Mártires”, estuvo originalmente la reliquia de la piedra en la que se aprecia los pies y el báculo de San Vicente, que quedaron impresos cuando le sometieron a su prueba de fe en el templo de Júpiter. 

Posteriormente se trasladaría a la Ermita de Nuestra Señora del Piélago, donde permaneció hasta que fue sustraído.


Imágenes exclusivas de la Ermita de Ntra. Sra. del Piélago


Restos de la Ermita en donde están todavía los huecos,
 para sujetar las vigas de madera...



Restos de las paredes de los muros...




Marzo de 2021


La borrasca Filomena y la nevada posterior sin precedentes, han ocasionado una tremenda devastación en la vegetación de la sierra...

Ramas, arbustos, plantas y zarzas han sufrido el tremendo peso de la nieve, que ha tenido espesores de 70 - 100 cm.


Una parte del lienzo de la ermita, con los huecos para la sujeción de las vigas.



Se observan confundidas con la vegetación... otras partes de la ermita...




BIBLIOGRAFÍA

La Mejor Tierra de Castilla
La capilla de los Santos Mártires de la Colegial
Miguel Méndez-Cabeza
http://lamejortierradecastilla.com/la-capilla-de-los-santos-martires-de-la-colegial/

Un ermitaño en la Sierra de San Vicente en el s. XVII: el hermano Francisco de San Vicente. Nuevos datos sobre su azarosa y desconocida vida (pdf)
Ángel Deza Agüero (Historiador)
Colectivo Arrabal - Cuaderna